La legendaria banda de Rock and Roll The Quireboys volvía un
año después a Sevilla, esta vez a presentar su nuevo disco de estudio “Twisted
Love” y no podíamos dejar pasar la oportunidad de disfrutar de un gran
concierto de buen Rock and Roll, algo que es norma en los shows de los
ingleses.
Antes que nada, desde Baquetas y Púas queremos disculparnos
con Metro Motel y Visitantes, ya que por motivos laborales no pudimos presenciar
su actuación y por lo tanto, no podremos hacer una crónica de sus conciertos.
Esperemos que para la próxima vez pueda ser.
La sala presentaba una muy buena entrada, algo habitual en
las visitas de los londinenses, y es que en nuestra ciudad son muy queridos y
pudimos ver a los habituales de sus conciertos puntualmente en la Sala.
Ciertamente es un gustazo poder ver a una banda como The
Quireboys, que vive y disfruta de su música, con estilo, con pasión y sobre
todo con buen rollo y conexión con el público, al que saben meterse en el
bolsillo desde el primer minuto.
Abriendo con el tema que da título a su última entrega discográfica,
la banda entro en el concierto con feeling y estilo. Un tema algo pausado, muy
bluesy, pero perfecto para iniciar el show, invitando a sentir la música.
Solo hicieron una concesión más al nuevo disco, con “Breaking
Rocks”, ya que, como es normal, basan su show en su disco más exitoso, el
legendario “ A Bit of What you Fancy”, por el cual, no han pasado los años y
sigue sonando bestial en directo.
Aun así, hubo tiempo para tocar un poco de toda su historia,
con temas de otros discos, como la preciosa “Mona Lisa Smiled” o la siempre
celebrada “This is Rock´n´Roll”, toda una declaración de intenciones por parte
de la banda y que cumple en su máximo exponente.
Siempre comandados por la voz rasgada de Spyke, por quien
parece que los años no pasan y es que como el buen vino, se hace aún mejor con
los años y su nivel vocal es enorme, sin olvidarnos de su grandísima presencia
en el escenario. De la formación original le sigue acompañando a la guitarra,
Guy Griffin, con ese estilo y feeling propio de los guitarristas influenciados
por el Blues y el Rhythm and Blues.
Me sorprendió bastante la inclusión de su gran hit “Hey You”,
en mitad del show, ya que los esperaba más al final. Pero no digo yo que la
jugada salga mal del todo, ya que es un buen subidón a mitad del concierto que
sirve para levantar a la gente y llevarlo en volandas en la segunda parte.
Y eso es básicamente lo que paso, siendo un paseo triunfal
de la banda, que también es verdad, que ya casi no dejo su disco debut en lo
que resto de concierto, dejando un tema como “I love this Dirty Town”, de su
disco “Homewreckers and Heartbreakers”, para abrir los bises, y darle un buen
enganche a la recta final.
Por supuesto, no podía faltar para despedir el concierto, “Sex
Party”, que prácticamente desde que empezó el concierto no dejo de ser
solicitada por el respetable. Como si no fueran a tocarla.
La verdad es que da gusto encontrarse con bandas como The
Quireboys, que tuvieron su época de grandes masas hace años, pero que han
sabido adaptarse a los tiempos menos exitosos y dar conciertos ante muchísima menos
gente, pero dejando el listón por las nubes.
The Quireboys son un seguro en directo, y no es cuestión de
que te gusten sus temas, es que la calidad y el buen gusto sobre el escenario
son lo que hacen a esta banda grande y que disfrutes del principio al fin sus
shows. Algo que hizo el que subscribe. Un placer. Esperemos que vuelvan pronto,
allí estaremos.
Fotos: Ángeles Garrido
Crónica: Augusto Arévalo
