Hace ya unos meses de la salida al mercado del último disco
de los madrileños Saratoga, posiblemente una de las bandas legendarias de
nuestro Heavy Metal más en forma. Tras aquel pequeño parón de actividad, la
banda ha regresado con mucha fuerza, tras la gira de reunión y ese disco, ya
mencionado, que les ha devuelto a la primera línea.
Un disco (del cual podéis nuestra review en el blog), que
tiene todos los elementos que definen a Saratoga como banda, con una formación que
representa todas las épocas de la banda y que resume perfectamente su esencia.
Con estas premisas, la banda se ha embarcado en una gira de presentación,
con muchas fechas por nuestro país y por supuesto, por Sudamérica. Una gira que
el pasado marzo le trajo de nuevo a Sevilla, cita casi obligada para la banda
desde hace años.
Cuando llegamos a la Sala pudimos ver que la convocatoria había
tenido un buen seguimiento y que un buen número de fans se había congregado en
la Sala Fanatic para ver en directo los nuevos y viejos temas de la banda.
Curiosamente, la banda tocaría sola esa noche, sin banda
invitada. Cada banda tiene su política y por supuesto, los promotores igual,
pero tampoco habría pasado nada por haber metido a una banda local y darle la
oportunidad de tocar ante más público. Para la próxima.
Por las cosas que suelen ocurrir en esta ciudad, vamos, sin explicación,
el concierto empezó con bastante retraso. Igual era el hueco que podría haber
utilizado la banda invitada.
Antes de empezar con la crónica, y como suelo hacer en
muchas ocasiones, considero importante dar a conocer mi opinión sobre la banda.
Es bien conocido entre mi círculo de amistades, que no soy un gran seguidor de
la banda. Es una simple cuestión de gustos, ya que de hecho, independientemente
de la música que hagan, que los miembros de Saratoga son grandes músicos, de lo
mejor de nuestro país y es demostrable, no solo por su trabajo en la banda, si
no por su historial personal de cada uno.
Aclarado este punto, es cuando precisamente valoro la crónica
de este concierto. Sobre el escenario de la Fanatic pudimos ver a una banda en
una forma envidiable, poderosa y con una gran complicidad entre los cuatro músicos,
que se notaba que con solo mirarse sabían lo que tenían que hacer.
Posiblemente, tras Leo Jiménez, Tete Novoa sea el vocalista más
vilipendiado y criticado del panorama español (por supuesto, no entre sus fans)
y lo curioso es que no es por sus capacidades de vocalista. Está claro que
criticar eso será una autentica falacia. Tete tiene una potencia y modulación que
más de uno le gustaría haber tenido una vez. Pero es que además, ha cogido el
mando de la banda en directo y se convierte en el centro de los conciertos, en
el frontman que debe ser, dándole a la banda un plus de energía y juventud, por
no decir jovialidad, que contagia al resto de los integrantes.
Decir algo de los dos miembros fundadores de Saratoga, Niko
y Jero, seria incluso redundante. Se dice que los buenos músicos, mejoran con
la edad, y es que en este caso es cierto. Clase, estilo, buen hacer, saber
estar, y sobre todo, calidad. Son historia viva de nuestra música y por
desgracia, creo que no son lo reconocidos que deberían, en beneficio de otros
que hace años que no hacen nada nuevo.
Y por supuesto, no puedo olvidarme del motor de la banda, el
gran Dani Pérez, que sigue siendo el machaca parches de siempre, de hecho,
nunca dejo de serlo. Algo que demostró durante todo el concierto y sobre todo
en el rato que tuvo para su solo, que fue contundente, directo y efectivo.
La verdad es que los fans de la banda son muy emotivos y
buena prueba es que durante el concierto no pararon de animar, saltar y cantar
todos los temas que se sucedían, incluso los nuevos, que siempre cuestan más
por su cercanía en el tiempo. De todas formas, ya hace unos meses que se editó
el disco, y eso siempre ayuda a poder escuchar bien las canciones antes del concierto.
Un buen repaso a sus mejores temas, y a su nuevo disco fue
el setlist elegido, bastante amplio y que tuvo incluso un pequeño set acústico que
sirvió de prólogo a los bises. Ciertamente Tete es capaz de cantar tanto sus
temas como los de Leo y eso es importante en la banda, con tanta discografía y
variada. Igual se echó de menos alguna canción más de la época anterior de
Tete, pero teniendo álbum nuevo, alguna canción debe faltar.
Al fin y al cabo, si algo me quedo muy claro del concierto,
es que las canciones escogidas son lo de menos. La energía de la banda, lo que
trasmite, es lo importante, y Saratoga es todo un referente para esto. Auténticos
especialistas en dar un buen concierto.
Buena prueba de lo satisfechos que se quedaron ellos mismos,
es que tras el show decidieron salir y pasar un buen rato con sus seguidores,
para hacerse fotos y firmar algún autógrafo. Todo un detalle, que demuestra aún
más los buenos músicos que son.
Por cierto, que Tete comento que celebrarían su 25
aniversario con una gira y que por supuesto, tendría que pasar por Sevilla. Aquí
estaremos para volver a verles en directo. Gran noche.
Crónica y fotos: Augusto Arévalo
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