Crónica de la jornada de Jueves del Leyendas

La jornada de Jueves se abría con los daneses D-A-D  bajo un intenso calor. A pesar de ser un grupo de éxito en Dinamarca aquí en España no se conocen demasiado, pero la calidad de la banda y el espíritu positivo que siempre muestran hizo que el concierto resultara bastante divertido. Con su particular estilo de heavy rock clásico, repasaron sobre todo su disco “No Fuel Left for the Pilgrims” y “Risking it all”. Buen concierto del grupo de los hermanos Binzer, que a pesar del calor trataron de cuidar su estética siempre acorde al concepto “Disneyland After Dark” con el que tratan de trasmitir el espíritu de su música.

 

Dragonforce se presentaban en Villena dentro de su accidentada gira, en la cual su vocalista Marc Hudson ha causado baja temporal debido a problemas de salud. Teníamos la curiosidad de ver si sería el youtuber  Pellek quien se subiría a las tablas como ocurrió en anteriores citas, pero no fue así. En este caso sería Alessio Garavello (cantante de A New Tomorrow)  quien defendería los temas de la banda y bastante bien por cierto. Concierto entretenido de power metal, donde la banda repasó temas como “Symphony of the Night“, “Operation Ground and Pound” ó “Cry Thunder” con sus clásicos largos punteos. Para terminar, la conocida y video jugable “Through the Fire and Flames” hacía disfrutar a los fans de la banda. Como punto negativo, los problemas de sonido que interrumpieron “Heroes of our time” a mitad de canción, como el día anterior ocurriera con Fear Factory o los Mojinos Escozios.

Por motivos personales tuvimos que ausentarnos durante un par de horas del festival, pero llegamos justos para disfrutar de unas leyendas del género, los británicos Uriah Heep. Y es que este grupo formado en los 70 por Mick Box (único miembro origina activo en la banda) y Lord Byron (cantante original ya fallecido) es considerado como uno de los pioneros del género junto a bandas como Led Zeppelin o Deep Purple. El concierto comenzaba con los sonidos del teclado de Phil Lanzon, sólo en el escenario, mostrando ese tipo de acordes tan característico de la banda y dando paso a sus compañeros para comenzar con “Gypsy”. Si bien Box es el único miembro original, tanto Lanzon como el vocalista Bernie Shaw son parte fundamental del grupo desde hace 3 décadas, y podemos decir que es un disfrute el poder ver a esta formación en directo. Además de la mencionada “Gypsy”, otros clásicos como “Look at yourself” o la mismísima “Easy Living” con la que cerraron el concierto nos transportaron a esos sonidos clásicos de las bandas de antaño. Por supuesto que el grupo no se quedó ahí anclado, y nos ofreció varios temas de su último disco “Outsider”. Gran acierto el de este festival el de incluir bandas de estilos variados y no olvidarse de ese rock de los 70 con sus toques progresivos que tanto ha influido en el heavy metal.

Ya con la noche presente, llegaba uno de los momentos que esperaba con más curiosidad de este festival, el show de los angelinos Steel Panther. Y digo show porque al margen del buen sonido de sus conciertos, este cuarteto lleva el glam metal un punto de parodia bastante extremo que no todo el mundo interpreta de igual forma. Con letras irreverentes, siempre basadas en el sexo, largos discursos y con la interacción con el público, los Steel Panther no suelen dejar indiferentes a nadie. Comenzaron, como siempre, bastante moviditos con “Eyes of a Panther”  y “Tomorrow Night”, y poco a poco fueron desglosando temas como “Party Like Tomorrow is the end of the World” o “Asian Hooker” incresciendo la interacción con el público. Y este punto es el que quería comprobar… pues la semana antes mismamente un servidor los pudo disfrutar en Wacken donde la entrega y participación del público fue total. Esta interacción y todas sus bromas (siempre en inglés) quizás no son entendidos aquí en España de igual forma, y si bien hay bastante gente que los disfruta, también abundan los “haters”. Creo que el grupo es consciente de ello y en esta ocasión sustituyó uno de sus clásicos cortes hablados por un solo de Satchel bastante original y divertido en el que repasaba esos riffs que todos tenemos grabados en nuestras mentes de bandas como Metallica o Iron Maiden, al tiempo que aporreaba el bombo de la batería.

Ya en la segunda mitad del concierto el cantante Michael Star subía a una chica al escenario para cantare su “Girl from Oklahoma” al tiempo que todos los miembros de la banda improvisaban unos pocos versos. Para el siguiente tema, “17 Girls in a Row” si que se produjo una subida masiva de féminas. Para cerrar el concierto no faltaron “Gloryhole”, su balada “Community Property”, “Party all Day (Fuck All Night)” y “Death to all but Metal”. Concierto divertido, entretenido y con muy buen sonido.

Cambiando de tercio llegaba uno de los momentos centrales del festival con el conciertazo que se dieron los también estadounidenses Anthrax. Con un Belladona a un gran nivel vocal, Scott Ian como auténtico showman a la guitarra, el ritmazo de Frank Bello al bajo y Charlie Benante a la batería, sin olvidarnos de Donais también a la guitarra, los americanos hicieron disfrutar de lo lindo al público de Villena que no paró de hacer moshpits durante todo el concierto. Abrieron con “You Gotta Believe”, de su último álbum “For all Kings” para continuar con varios  clasicazos como “Caught in a Mosh”, “Madhouse” y “Got the Time” en el que particularmente el ritmo impuesto por Bello al bajo es espectacular. Además de los clásicos, durante el concierto fueron combinando temas de su último disco como “Evil Twin” o “Breathing Lightning”, con algunos de su anterior trabajo Worship como “Fight’Em ‘Til You Can´t” o “In the End”. 

Destacar el homenaje a Dio y a Dimebag Darrel en “In the End” mediante las lonas laterales en el espectacular montaje del escenario.  No faltaron “Medusa” y la archiconocida versión del “Antisocial” de Trust.  Para terminar, ya en los bises nos deleitaron con la divertida y peculiar “I am the Man” con Scott Ian y Fran Bello a las voces para cerrar posteriormente con Indians, no podía ser otra. Conciertazo de estos grandes del thrash.

Ya entrada la noche, 2:00 de la mañana, tocaba ya por fin disfrutar de grupos españoles en los escenarios principales. No fue otro que Leo Jiménez el que se marcó otro conciertazo animando al personal en una hora que no era precisamente la más propicia. Algunos hechos del concierto: pedazo de banda, sonido genial y como siempre la gran presencia de Leo, guitarra en mano, con su poderosa voz.  Sonido contundente con un Leo en gran estado de forma repasando sobre todo temas de su época en solitario, tanto con 037 (“Caminos de Agua”) o de Animal Solitario (como “Misantropía”). No podían faltar temas de su último disco en el que Leo vuelve a demostrar que a pesar de haber formado de una de las bandas clásicas del país, como Saratoga, se atreve a explorar todo tipo de sonidos y siempre con un gran resultado y calidad. Para terminar, “Resurección” de Saratoga y la versión de “Hijo de la Luna” terminaron de despertar al ya a esas horas cansado público.

El mismo Leo, además de recordar lo intempestivo de la hora, animaba al público a disfrutar de una banda que por ese motivo lo tendría todavía más complicado, los grandes Hamlet que saltaban el escenario a las 3:00. Una de las pocas críticas que se les puede hacer a este festival es precisamente las altas horas a las que tienen que tocar algunos grupos, y sobre todo que en este año hayan sido grupos españoles y de muchísimo tirón (Leo, Hamlet, Crisix, Saurom, Avulsed, Angelus Apatrida, Baron Rojo o Lujuria entre otros). Además, en muchos casos coincidiendo entre ellos, como en esta hora Hamlet y Crisix, aunque sean de estilos diferentes.

En esta ocasión nos decantamos por Hamlet para ver su primera actuación en el Leyendas del Rock, sí, primera en 11 años.  Hamlet nunca decepciona, de hecho podría decir que pocos grupos demuestran tantísima seriedad y actitud en el escenario. A pesar del cansancio del público, Molly se los llevó completamente a su terreno y se los metió en el bolsillo. Ya sin camiseta y dándolo todo, Molly se juntó con su público en el sentido más literal, aupado agarrado de una mano que le aguantaba, y desgarrándose la voz. Concierto con tremendo ritmo, con ese sonido alternativo tan característico de la banda y con un repertorio variado en el que no faltaron en su tramo final clásicos como “Denuncio a Dios”, “Un Mundo en Pausa”, “Irracional” o “Jodido Facha”.

Y tras una largo día de conciertos llegamos a casa a las 5:30 de la mañana con una amplia sonrisa tras haber disfrutado de una gran variedad de conciertos aunque bastante cansados. Ya planeando la jornada del día siguiente vemos que será complicado aguantar toda la jornada, pero con muchas ganas de lo que se avecina.